Hoy en día para muchas personas el ser espiritual, es hacer yoga, meditar, conocer de numerología, registros akashicos, etc., sin embargo la espiritualidad va mucho más allá de eso.
La espiritualidad es un estilo de vida, es una actitud hacia Dios, es un viaje a tu yo interno, descubriéndote a ti mismo, desarrollando cualidades divinas como la caridad, la bondad, el altruismo, el amor y el perdón, para desarrollar la espiritualidad es necesario conocerte, saber quién eres, de leer más acerca de tu existencia, de tu alma.
Muchas personas que han trascendido como Siddhartha Gautama, Ramtha, Krishnamurti, incluido Jesús el Cristo, nos han dicho como llevar una vida en tranquilidad y armonía, inclusive los propios 10 mandamientos que Dios le dio a Moisés nos hace ver que son cosas que si llevamos a cabo y mantenemos en quietud a la mente no dándole cabida a otras cosas que hoy en día la gente lo ve casi como normal, mantendremos un estilo de vida armonioso.
Si logramos el autoconocimiento de nosotros mismos y tratamos de vivir como Dios, Jesús y las personas que han trascendido nos lo han mostrado, créanme que no existiría hoy en día tantos suicidios, depresiones, ansiedades, trastornos, enfermedades mentales que hacen sufrir a la humanidad, sin embargo nuestra sociedad se ha visto inmiscuida en dolores del alma que no saben cómo sanar y lo reflejan en actitudes, en conductas violentas, de desamor hacia ellos mismos y al prójimo y lo peor hacia sus hijos y esos niños cuando crecen repiten el mismo patrón de conducta., siendo esto una cadena de sufrimiento.
¿Quién no ha sufrido en esta vida? el sufrimiento es falta de entendimiento, si queremos romper esas cadenas, empecemos por el principio, por el autoconocimiento.
Existen personas que alguna vez me dijeron yo he tenido una vida muy feliz, no he vivido tristezas ni angustias ni nada parecido y yo preguntaría, si bien es cierto que se aprende a vivir esos momentos de felicidad también es cierto que los momentos de dolor, de frustración, son los que principalmente nos proporcionan ese trampolín de crecimiento, es por ello que es importante identificarlos y superarlos, ello te proporciona la sabiduría de la vida.
Cuando comprendes como funciona la vida, dejaras de ver a las personas desde su cuerpo físico y las observaras como almas que están en un proceso de crecimiento y evolución para llegar a la presencia celestial o al universo según sus creencias, dejaras de criticarlas, juzgarlas y simplemente observaras sin enfadarte porque para entonces la paz y la calma habrá llegado a ti, por supuesto como ser humano te caerás pero te recuperaras enseguida.
Deseo que estas palabras lleguen a tu alma y las reflexiones todo lo que llevan encerradas. (sin hablar de religión)